TU TIPO DE PIEL ES...
SENSIBLE
Una piel sensible puede ser cualquiera de los otros tipos de piel. Por ejemplo, sensible grasa, sensible mixta o sensible seca, aunque es más común en una piel seca. Este tipo de piel se distingue por una piel con enrojecimiento (eritema), acompañada de sensación de picor, calor, ardor y/o tirantez y, generalmente, reaccionan fácilmente a la aplicación de algunos productos, sobre todo aquellos que tienen alto contenido de alcohol o alérgenos. Si cuentas con este tipo de piel es necesario brindarle un cuidado con productos suaves que aporten humectación para fortalecer la barrera cutánea, y evitar productos como exfoliantes particulados, productos perfumados o con parabenos, ya que, de lo contrario, sería más propensa a desarrollar rosácea, algún eccema o dermatitis.